El puente Banpo se encuentra en el centro de la ciudad de Seúl, el cual, evidentemente y como todos los puentes, conecta a dos extensiones de tierra dividas por el mar. La peculiaridad de éste, es que cuenta con un sistema de fuentes que iluminan el agua al momento de salir por los tubos, y cuando se oculta el sol podemos apreciar un juego de luces que nos recuerda a un arcoiris. En lo particular, ese tipo de espectáculos de luces y sonidos, y además con agua, me parecen bastante sosos, y faltos de gracia. Es como ver a las moscas atraídas a la luz. Aún así, cumple con su función y a pesar del agua y las luces, es un puente bastante bonito.
Carla M. Lozada Nava 